El monitoreo de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable se realizó sobre las tres regiones donde se concentra el 85 por ciento del bosque nativo del país. Se trata de la selva misionera, el parque chaqueño y la selva tucumano-boliviana. Según biólogos y expertos consultados por Clarín, éstas son algunas de las especies en situación vulnerable por la deforestación.

En la selva misionera, la pérdida de bosque nativo pone en riesgo a especies como el yaguareté, el puma y el ocelote y otros mamíferos como el tapir, monos, corzuelas, dos especies de pecaríes y el coatí. El bosque nativo se compone allí de Pino Paraná, palo rosa, lapacho negro, guatambú y anchico. Todas especies amenazadas.

En la selva de Yungas ( monte tucumano-boliviano) también el yaguareté resiste a la amenaza de las topadoras, junto al tapir, el guacamayo verde, el loro alisero y el pato criollo. En cuanto a la flora nativa son propias de la región el cedro, el viraró, los alisos, el cebil, el horco-cebil, el vinal y el lapacho.

En el Parque chaqueño (el más castigado por la deforestación, según el informe oficial) están amenazados el yaguareté, el tatú carreta, el aguará guazú, el ciervo de los pantanos, el lobito del río y el chancho quimilero y las especies típicas del bosque nativo: quebracho colorado, quebracho santiagueño, quebracho blanco, algarrobos y guayacán.

 
Fuente: Fresplaza