El boom de la agricultura de la última década y el desarrollo de la aviación deportiva dinamizaron a la industria aeronáutica que hoy involucra a más de 900 trabajadores, según datos que maneja el Ministerio de Industria.
Precisamente, el titular de esa cartera, Roberto Kreimerman, explicó a El Observador que se trata de un sector “pequeño” que viene creciendo a tasas “muy importantes” anualmente, por eso el Ministerio está trabajando con los integrantes de esta cadena en un mesa sectorial para trazar políticas e incentivos a mediano y largo plazo.
“Hay una serie de oportunidades para desarrollar la industria aeronáutica”, resaltó Kreimerman. En ese sentido, señaló que Uruguay ofrece una infraestructura importe para esta cadena y eso se ve reflejado en el incremento de la demanda de aeroaplicadores (aviones que se utilizan para la fumigación de cultivos).
“Tenemos la intención de alentar la conformación de un clúster para fomentar el trabajo asociativo. Dentro del Mercosur hay una posibilidad de trabajar en un plan de integración conjunto con Brasil”, recordó el ministro de Industria.
Uno de los objetivos que se trazó el Ministerio de Industria a mediano plazo es definir en Uruguay una normativa común para la industria aeronáutica dentro del Mercosur para la prestación de servicios. Así como delinear un programa de desarrollo de proveedores para empresas locales. Estas iniciativas están siendo coordinadas por la Dirección Nacional de Industrias y la Dirección Nacional de Pequeñas y Medianas Empresas (Dinapyme).
Agro y deporte
El desarrollo y la expansión que registró la agricultura de la mano del boom sojero abrieron el camino para que la aviación encontrara un nicho de negocio.La utilización de aeroaplicadoares es cada vez más común en grandes superficies agrícolas por las ventajas que ofrece respecto a las fumigaciones tradicionales de cultivos. Una de ellas es que con las aviones se evita el “pisoteo” de los cultivos y la dependencia del clima es menor respecto a maquinaria terrestre como los “mosquitos”.
Kreimerman indicó que el crecimiento de esta industria estuvo apoyado fundamentalmente por el sector agrícola y deportivo. En el primer segmento el número de aeronaves creció un 50% en los últimos años, según el jerarca.
Actualmente, Uruguay cuenta con 33 empresas en todo el país que prestan servicios con aeroaplicadores. Estas aeronaves se utilizan para los cultivos de arroz, soja, papa, maíz, entre otros. En tanto, el número de talleres auxiliares que ofrecen servicios de reparación y mantenimiento para pequeñas aeronaves en Uruguay ya alcanza los 23.
Por su parte, del dinamismo de la industria aeronáutica también está atado al desarrollo de esta actividad como deporte, apuntó Kreimerman. En particular por la aviación deportiva con la reactivación de varios aeroclubes en el interior del país para la práctica de paracaidismo y aviación experimental. Uruguay cuenta con 27 aeroclubes y aeródromos y 10 aeropuertos en todo el país. Asimismo, otros de los servicios que ha emergido en los últimos años fue el de taxis aéreos, que empresas privadas ofrecen para ejecutivos e incluso para autoridades del Poder Ejecutivo. En total, la industria aeronáutica involucra a 900 trabajadores.
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