A pesar de que las lluvias perjudicaron a los productores de cerezas y arándanos, la fuerte demanda externa e interna proyecta buenos precios para los agricultores para el resto de la temporada.

“Está claro que cada temporada es distinta, pero ésta lo es aún más. A las variables usuales, como el dólar o la demanda, hay que agregarle la incógnita climática”, afirma…